Todos nos equivocamos cuando damos la fecha fundacional de nuestra empresa, no es cuando nos registramos en el SAT, ni cuando firmamos el acta constitutiva; tampoco cuando reunimos el dinero para iniciar operaciones; las empresas se fundan en el momento en el que se sueñan.
Sí, el momento fundacional de las empresas es cuando surge el sueño de emprender. Y así, algunos sueñan con vender, otros con  producir, otros con anunciar, y así para cada uno; pero luego están los que sueñan con cambiar al mundo, con ir más allá de donde cualquiera haya ido, es más, ir más allá de donde cualquiera haya soñado ir. Es como tirarle a la Luna.
Y eso es Moonshot Thinking, es una metodología de innovación que busca lograr que soñemos en grande, que miremos muy, muy adelante y que intentemos fundar nuestra empresa en esos sueños. La utilizan empresas como Google, por ejemplo, empresas que han desarrollado tecnologías y servicios y productos verdaderamente transformadores del entorno.
Con Moonshot se busca que los problemas que se deseen resolver con la innovación sean problemas mayúsculos y que afecten a una cantidad enorme de seres humanos, o al planeta mismo, por ejemplo, las alergias, la diabetes, la contaminación urbana, la discapacidad visual o auditiva; que el problema no sólo sea grande, sino que también sea creciente, es decir, que a pesar de lo que hemos ya hecho para resolverlo, aún sigue creciendo. También Moonshot incorpora algo que llamamos Tecnologías exponenciales para acelerar y masificar el efecto de la solución; las tecnologías exponenciales son aquellas que tienen la capacidad de hacer lo que pretendes que hagan, pero que en un plazo muy corto serán muy, muy baratas, y por lo tanto, podrá democratizarse, es decir, que todos podamos acceder a ellas, y que además, también en un corto plazo, podrán ser utilizadas para muchos propósitos diferentes; y actualmente las hay por todos lados y de todos tipos, por ejemplo, procesadores de computadoras super rápidos y super baratos, materiales como el grafeno que son extraordinariamente versátiles; bacterias programables, nanobots, drones, etc.
Pero, quizás, lo más interesante es que Moonshot busca soluciones radicales, cosas que nadie haya hecho antes, por ejemplo, tomemos el ADN de una medusa que es capaz de emitir luz por sí misma, y programamos parte de ese ADN en una planta, lo que tenemos es una planta bioluminosa, que no consume energía eléctrica, y que puede ser sembrada en las ciudades para tener iluminación natural por la noche, pero además eliminar la contaminación visual de los postes de luminarias, el cableado, el consumo de electricidad, y, por supuesto que no sólo elimina la contaminación, sino que además, por ser planta, se convierte en un pulmón urbano. Eso no es sólo un pensamiento Moonshot, sino que además es ya real.
Acabamos de tener, con la Secretaría de Economía, un primer acercamiento con 120 jóvenes en Nogales este fin de semana, en donde en dos días de trabajo pudimos entrenarlos con esta metodología, no es el único momento ni será la única ciudad, tenemos ya en agenda a Agua Prieta, Cananea y San Luis Río Colorado.
Este fin de semana los chicos, y algunos adultos millenials, nos presentaron 12 ideas fantásticas que, estamos seguros, muy pronto podremos ayudarlos a construirlas, primero como plan de negocios, y luego como productos en el mercado.  Sus moonshots buscaron resolver problemas como la ansiedad, la depresión, la logística local y mundial; la conservación y cuidado del ambiente, entre otras; soñaron con tecnologías exponenciales que son 100% factibles como nanobots, biomasa, nano cápsulas con nutrientes y bacterias que recuperan y fortalecen el suelo, microchips que estimulan de forma personalizada las áreas de bienestar del ser humano; parches inteligentes y personalizados de nicotina y un espectacular etcétera que a nosotros no sólo nos hizo sentir orgullosos, sino que además nos hizo soñar con ellos, igual que ellos. Gracias Ernesto, Ewelina; gracias Stephanie, Rafael, Manuel, Alma; gracias Pablo, Christian.
Sus empresas ya han sido fundadas este fin de semana que las soñaron.
Enjoy